El tema de los edulcorantes no nutritivos es muy probablemente uno de los que más polémica genera en gran parte del mundo profesional y en la población en general.
Mientras un bando los abraza y festeja, el opuesto les teme e incluso los maldice.
¿Dónde quedamos parados ante esta irreconciliable controversia?
Qué son
Según el Código Alimentario se denomina edulcorantes no nutritivos a “un grupo de aditivos alimentarios que le proveen sabor dulce a los alimentos. Se utilizan como endulzantes alimentarios y que no aportan calorías, o bien, aportan cantidades insignificantes.” En nuestro país, los más utilizados son aspartamo, acesulfame K, sacarina, ciclamato, sucralosa, y los glicósidos de esteviol, conocidos popularmente como estevia o Stevia.
“Todos esos compuestos químicos”
Un primer punto que suelo identificar es el de la quimifobia, que no es otra cosa que una aversión irracional o prejuicio contra sustancias químicas o la química en general. Esto no significa que no haya compuestos químicos nocivos. Pero una cosa es un temor fundado, como el que puede haber ante un metal pesado como el plomo y otra diferente es temerle a todo lo que pueda estar relacionado con la química. De hecho, y en términos estrictos, todo es química.
“Claro -me dirá usted- pero no son químicos sintéticos”.
Pues bien, el hecho de que un compuesto químico sea sintético no significa que sea peligroso, así como tampoco es cierto que el que un compuesto de origen natural sea necesariamente inofensivo.
Sobrados son los ejemplos de químicos de origen natural, tales como el cianuro o el veneno de una cobra que podrían poner en peligro nuestras vidas. Abundan de igual manera, compuestos de origen sintético que han salvado incontables vidas, y que incluso mejoran nuestra calidad de vida cotidiana.
Comentarios y conclusiones finales
- Para perder peso de manera sostenida y eficiente, no alcanza simplemente con sustituir azúcar o bebidas azucaradas por sus contrapartes con edulcorantes.
- Reemplazar azúcar por edulcorantes parece, a la luz de la evidencia, una herramienta de utilidad en planes de pérdida y mantenimiento de peso, así como también en la prevención y tratamiento de diabetes tipo 2.
- Los edulcorantes podrían no ser inertes metabólicamente, pero no hay evidencia sólida que indique que estos efectos sean significativos clínicamente.
- Aun con todo lo planteado, en mi opinión personal y profesional, la mejor alternativa sigue siendo la de tomar agua. Asimismo debo decir que, en caso de querer endulzar, prefiero los edulcorantes por sobre el azúcar.
- Nota de importancia: en el caso de embarazadas, es recomendable evitar el uso de sacarina y ciclamato de sodio, dado que estos compuestos pueden atravesar la placenta.
Fuera de esto, no existe evidencia suficiente para recomendar el uso de un edulcorante por sobre otro.
- Las posturas extremistas, es decir, aquellas que afirman que los edulcorantes son veneno o, por el contrario, aquellas que aseveran que está absolutamente demostrado que no producen nada, ignoran o deciden ignorar una parte de la literatura científica. Los edulcorantes siguen siendo un tema de estudio, y si bien al día de hoy no hay pruebas de efectos negativos de relevancia en humanos, la ciencia sigue investigando permanentemente.
*Ramiro Ferrando es Licenciado en Nutrición (MN 8571) y Máster en nutrigenómica y nutrición personalizada. Su web: Pienso, luego como