Para entenderlo mejor hay que saber que hay dos tipos de tejido graso, uno blanco que es el responsable de los michelines, y otro marrón o beige, que se encarga de consumir calorías para permitir que el organismo alcance la temperatura corporal idónea. Cuando bajan mucho las temperaturas el cuerpo transforma de manera natural la grasa blanca en marrón, al igual que ocurre en los mamíferos que hibernan.
El estudio, llevado a cabo en ratones obesos y publicado en la revista ACS Nano, muestra que la aplicación de este parche cutáneo de un centímetro cuadrado de superficie puede acabar con el 20% de la grasa local que está en contacto con él. Y no solo eso, sino que también es capaz de reducir de manera significativa los niveles de glucosa en la sangre, por lo que podría ayudar en el tratamiento de enfermedades metabólicas como la obesidad o la diabetes.
El nuevo tratamiento contiene rosiglitazone (Avandia) y un agonista beta-adrenérgico (CL 316243) en nano partículas de 250 nanómetros, que en ambos casos provocan el proceso de conversión de grasa blanca a marrón, conocido como pardeamiento. Los fármacos se liberan poco a poco en el tejido adiposo subcutáneo con el que entran en contacto, gracias a las docenas de microagujas de las que está formado el parche, que se debe colocar cada tres días durante un periodo de cuatro semanas. En el estudio se colocó a cada ratón con obesidad dos de ellos en los laterales del abdomen inferior, uno con los fármacos y otro de placebo.
Un fármaco que elimina el exceso de grasa sin efectos secundarios
No es la primera vez que se intenta desarrollar algún fármaco que fomente el pardeamiento, no obstante, todos los que han demostrado ser eficaces hasta el momento tenían efectos secundarios importantes, como problemas gastrointestinales y fracturas óseas. Esto era debido a que los fármacos eran inyectados o ingeridos por vía oral, lo que hacía que los componentes viajasen por todo el organismo, provocando daños en otras zonas.Li Quiang, uno de los autores del estudio ha asegurado que el parche que han desarrollado no presenta ninguno de estos efectos adversos en ratones, pues actúa de manera local sobre la grasa localizada. Además, cree que esta nueva herramienta, si funciona también en los seres humanos, podría convertirse en una manera segura y eficaz de tratar la obesidad, cuya prevalencia tanto ha aumentado en los últimos años.