Sin embargo, a la fruta o más específicamente, a su jugo, se le atribuyen otros beneficios. Y es que según una investigación reciente, beber jugo de cereza antes y después del ejercicio puede disminuir el dolor y los daños musculares.
En el estudio participaron 14 voluntarios, a los que se pidió tomar el jugo fresco combinado con uno comercial de manzana o bien beber una mezcla falsa que no contenía el jugo de cereza. El jugo tenía el equivalente de entre 50 y 60 cerezas.
En el inicio del estudio, los estudiantes fueron sometidos a pruebas intensas de ejericios entre las que incluian mediciones de fuerza de brazos, dolor muscular, tensión muscular, y flexibilidad. Luego, los investigadores instaron a los estudiantes a beber una botella de su bebida asignada por la mañana y otra por la noche, durante ocho días.
El grado de dolor se diferenció poco en los dos grupos, pero fue menor en los que tomaron el jugo con cerezasAsimismo, se produjo una diferencia significativa en la pérdida de fuerza muscular entre aquellos que tomaban la mezcla con jugo de cereza y aquellos cuya bebida no contenía esta fruta. La puntuación en fuerza muscular cayó un 22 % en los que tomaron la mezcla sin cerezas pero sólo un 4 % en los que tomaron la bebida con jugo de cerezas.
En este sentido, los especialistas en medicina deportiva aconsejan ingerir esta bebida a diario para prevenir y combatir el dolor físico.
Finalmente, es importante mencionar que su alto contenido en agua y potasio, convierten a esta fruta en un diurético, beneficioso en caso de hiperuricemia o cálculos renales, hipertensión arterial u otras enfermedades asociadas a retención de líquido.