El ácido fólico se utiliza, de manera protocolizada, como suplementación durante el embarazo para prevenir defectos en el tubo neuronal del feto.
Su carencia se relaciona con la aparición de anemia megaloblástica.
El alcohol, los barbitúricos y las antiácidos son algunos de los elementos que empeoran el uso de ácido fólico. Mientras que la vitamina C colabora en el mantenimiento del ácido fólico.
Funciones del ácido fólico o vitamina B9
- Su presencia es necesaria en la formación de ácidos nucleicos (DNA, RNA), transportadores de la información genética hasta las células. En el caso de que la mujer esté embarazada es primordial un consumo de cantidades necesarias de esta vitamina, ya que su defecto puede originar anomalías congénitas.
- Tiene un papel conjunto con la vitamina B12 para la formación de hematíes (glóbulos rojos).
- Participa en la transferencia de moléculas de carbono, indispensables para sintetizar todo tipo de compuestos.
- Interviene en el desarrollo del sistema nervioso.
Fuentes alimentarias de ácido fólico o vitamina B9
- Hortalizas de hojas verdes: como espinacas, grelos, coles, lechuga.
- En algunas frutas, como cítricos, melón o plátano.
- Legumbres (habas, frijoles, judías).
- Carne (sobre todo de hígado y riñones).
- Cereales integrales.
- Leche y huevos.
- Algunos frutos secos.
Recomendaciones diarias de Vitamina B9:
100-300 µg/día en adultos.